Un gato con ansiedad puede sentir necesidad de orinar en un intento por calmarse, pero la caja de arena puede no ser el lugar elegido para hacerlo. Los frecuentes viajes a la caja de arena suelen indicar un problema médico subyacente que requiere tratamiento profesional para corregirlo.
Un gato nervioso. Los gatos son excelentes artistas cuando se trata de ocultar sus verdaderos sentimientos, por lo general, los enmascaran con una mirada de indignación o apatía. Un gato estresado puede no mostrar signos evidentes de ansiedad, pero su comportamiento traicionará sus nervios si sabes qué buscar. Puede ocultarse o asearse con más frecuencia en un intento por calmarse. Los gatos ansiosos también pueden sentir necesidad de orinar, pero desafortunadamente la caja de arena no es el lugar que elegirán. También tienden a excretar de manera inapropiada cuando están nerviosos, es decir, en lugares que no deben, como por ejemplo la alfombra del baño o encima de tu ropa.
Aliviar la ansiedad. Casi siempre es más fácil decir que hacer, pero aliviar la ansiedad de tu gato puede ser tan simple como eliminar todo aquello que la provoca. Por ejemplo, si no le gustan las visitas, puedes llevarlo a un lugar tranquilo para que descanse cuando tienes invitados. También puedes intentar calmarlo con productos como Feliway o esencias de aceite de lavanda que dan una sensación de relajación. Para aquellos gatos que están muy estresados, lo mejor es llevarlos al veterinario para que les mande un medicamento de prescripción que ayuda a aliviar la ansiedad y a mantenerlos calmados.
Causas que provocan un aumento de la micción. Si tu gato acude con frecuencia a la caja de arena puede ser por otra razón ajena a la ansiedad. Existen condiciones médicas subyacentes que pueden desencadenar ese aumento en la micción. Por lo general tu gato seguirá usando su caja de arena aunque más de lo normal. Condiciones tales como la diabetes, el hipertiroidismo y la enfermedad del hígado, pueden aumentar sus viajes a la caja de arena, así como numerosos problemas renales y del tracto urinario. Si el aumento de micción de tu gato viene acompañada con otros síntomas, tales como un cambio en el apetito o peso, es bueno que consultes al veterinario.
Tratamiento. Debido a que existen numerosas razones médicas que pueden incrementar la micción, hay numerosos métodos de tratamiento para corregirla. Una vez que el veterinario determine cuál es la causa, podrá indicarte un tratamiento para combatir el problema. Tu gato puede necesitar medicamentos que pueden ser a corto o a largo plazo para corregir el problema u otro tipo de atención para que pueda volver a tener una micción normal.
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