Si bien los términos Demodex gatoi y Demodex cati parecen términos exóticos, son sólo los nombres científicos de los ácaros de la sarna felina. Por supuesto, si tu gatico es diagnosticado con sarna, podrías decirles a tus amigos que está siendo tratado por un caso de Demodex cati que suena mucho mejor.
Sarna. La sarna causada por Demodex gatoi o Demodex cati se conoce como sarna demodectica o demodicosis. Otro término común es sarna roja debido a los bultos rojos característicos que aparecen. Afortunadamente, la sarna no es tan común en los gatos, aunque ciertas razas son más vulnerables que otras. Estos incluyen los siameses y los gatos birmanos. Como los ácaros de la sarna son demasiado pequeños para ser vistos a simple vista, normalmente viven en la piel de un gato y no causan ningún daño. La Demodex cati reside en los folículos pilosos de tu gatico mientras que la Demodex gatoi vive en la capa externa de la piel. Como los gatos que tienen sistemas inmunes comprometidos son más propensos a padecer sarna, la demodicosis por lo general afecta a los gatos mayores que tienen enfermedades subyacentes.
Síntomas. Además de los bultos rojos que pueden convertirse en úlceras con fluido, los síntomas de la sarna incluyen picazón constante y pérdida de pelo. Tu gato puede perder el pelo de todo el cuerpo o solo el del cuello y la cabeza. En cualquier caso, tendrá una apariencia lastimera y desagradable. Aunque la sarna felina no es contagiosa para las personas, si acaricias a tu gato y los ácaros llegan hasta tu piel, es posible que experimentes una erupción temporal.
Tratamiento. Antes de comenzar el tratamiento, el veterinario tomará muestras de piel de tu gato para averiguar qué tipo de ácaro está causando los síntomas y si una enfermedad subyacente es la responsable. Los gatos que sufren de sarna causada por Demodex cati podrían tener diabetes, cáncer o una infección por el virus de la inmunodeficiencia felina. Si la sarna es causada por Demodexis gatoi, es probable que no tenga ninguna enfermedad subyacente, pero si tendrá mucho picor. Aparte de tratar la enfermedad primaria de tu mascota, el veterinario podría recomendar baños con sulfuro de calcio para eliminar los ácaros de la sarna. También puede prescribir la ivermectina, un desparasitante que también mata los ácaros y antibióticos para curar infecciones de la piel.
Prevención. Dado que la sarna es tan contagiosa, una vez que regreses con tu gatico del veterinario debes tirar toda su ropa de cama, juguetes, cajas de arena, platos y reemplazarlos por otros nuevos. Si tienes otros gatos en la casa también deben recibir baños con champú o acaricidas, aunque no muestren signos de sarna. Pídele al veterinario que te recomiende un buen desinfectante para limpiar las partes de la casa a la que tus gatos tienen acceso.