Si tu pobre gatito está perdiendo peso a un ritmo rápido, o si has encontrado un gatito demasiado flaco, es el momento de sacar el arma grande – el veterinario. Aunque algunos gatos son naturalmente delgados y no hay motivo de alarma, una pérdida de peso significa que está gestando problemas de salud.
Anatomía básica
Un gato sano tiene una capa de grasa para proteger sus huesos y órganos. Si puedes ver las costillas o las caderas de un gato, puede estar poco saludable y con bajo peso. Si al tocar la base de la cola es huesuda en lugar de lisa, el gato está bajo de peso. Si nos fijamos en la cara del gatito y hay una pendiente pronunciada de su vientre a su pecho, está bajo de peso.
Las causas simples
Las causas de un bajo peso corporal pueden ser simples. Por ejemplo, si tu gato gasta mucha energía y es un comensal quisquilloso. Si se pasa el día corriendo, jugando y saltando en vez de dormitar, el aumento de sus porciones y la frecuencia de sus comidas puede embalar los kilos de nuevo. Si acabas de encontrar un gato y está demacrado, es muy probable que sólo sea hambre, y solucionar el problema puede ser tan fácil como alimentarlo – después que un veterinario lo revise en busca de enfermedades, por supuesto.
Enfermedades
Por desgracia, a veces no es tan fácil como la alimentación de un gato que ha perdido peso. La condición subyacente tiene que ser determinada y tratada primero. Algunas enfermedades, como la peritonitis infecciosa felina – que no tiene ni una cura ni un tratamiento eficaz – el virus de la inmunodeficiencia felina y el virus de la leucemia felina pueden hacer que pierda peso. Eso es sólo la punta del iceberg, en cuanto a enfermedades de mayor peso, el gato podría tener diabetes, una enfermedad de la tiroides, cáncer, una enfermedad inflamatoria intestinal, problemas de hígado o insuficiencia renal.
Diagnóstico y tratamiento
Cuando lleves a tu gato súper flaco al veterinario, este probablemente ordenará un análisis de sangre y de orina. Él va a escuchar el corazón de tu gato y sentir su área del estómago para asegurarse de que no hay bloqueos. También podría revisar los ganglios linfáticos del gatito para detectar signos de hinchazón. Pregúntale al veterinario si tu gato tiene bien los líquidos intravenosos, – en situaciones de emergencia, en la que tu gato ha perdido demasiada masa corporal, el veterinario puede indicar líquidos inmediatamente al pobre gatito. Una vez que la causa de la pérdida de peso se hace evidente, debes trabajar junto con el veterinario para llegar a un plan de tratamiento.