Si nunca antes has tenido un gato, la primera visita al veterinario puede provocarte tanta ansiedad a ti como a él, pero si sabes qué esperar antes de llegar allí, puede hacer que te sientas mejor y tu estado relajado también tendrá un efecto positivo en tu mascota. Por lo tanto, asegúrate de:
- Llama a la oficina del veterinario y averigua cuáles son los cargos por los diversos procedimientos para que no te sorprendas cuando veas la factura.
- Lleva una muestra fecal para que el veterinario pueda examinarla en busca de parásitos.
- Asegúrate de llegar a tiempo a la cita porque muchos de las oficinas veterinarias están siempre llenas y cerciórate de que tu gatico esté en un trasportador seguro.
- Si adoptaste a tu gatico en un refugio o de un criador, pide los registros de salud y vacunación. Al llegar a la oficina del veterinario habla con la recepcionista y dale los registros. Este documento será el inicio del expediente de salud de tu gato y será una garantía para que no lo vacunen o le hagan pruebas que no necesita.
- Tú y tu gatico se encontrarán en una sala de examen donde lo puedes dejar fuera de su trasportador permitiéndole que explore si así lo desea. Si tu gato necesita vacunas, el técnico veterinario se encargará de prepararlas y el veterinario se encargará de administrárselas. Él tratará a tu gatico con cariño y hará todo lo posible para que se sienta cómodo y luego comenzará a examinarlo; va a comprobar su pulso y respiración con el estetoscopio, va a palparle (tocar y prensar) los órganos abdominales, mirar sus oídos, los ojos, los dientes y pasarle un peine de dientes finos por los pelos en busca de pulgas.
- Si tu gato no ha recibido ningún tipo de vacuna el veterinario le administrará sus primeros disparos y, si no ha sido examinado para determinar si tiene el Virus de la Inmunodeficiencia Felina (FIV) y la Leucemia Felina (FeLV), le va a tomar una muestra de sangre para la prueba. Estas pruebas se realizan en la oficina del veterinario y suelen tardar de cinco a 10 minutos para saber los resultados.
- Mientras examinan a tu gato, el veterinario te explicará lo que está haciendo y te hará preguntas acerca de su temperamento, los hábitos alimenticios y el uso de la caja de arena. Después de terminado el examen, las pruebas de sangre y el análisis fecal, el veterinario te explicará los resultados. Si tu gato tiene parásitos o pulgas te recomendará las opciones de tratamiento. Si la prueba de sangre da positiva a FIV o FeLV, te dirá lo que eso significa.
- Antes de salir tendrás que pagar la cuenta y hacer otra cita para las vacunas de refuerzo en unas pocas semanas. Cuando vuelvas a casa asegúrese de darle más cariño y decirle lo bueno y valiente que fue aunque no sea así.