Los coyotes ciertamente podrían matar gatos si quisieran. Un depredador del tamaño de un perro grande, como es un coyote, puede dominar fácilmente a un gato. Los encuentros desafortunados entre un coyote y un gato no ocurren a menudo, pero suceden.
Dieta de un coyote.
Aunque están íntimamente relacionados con los lobos, y, de hecho, los perros, estas razas cruzarse para producir descendencia fértil, los coyotes ocupan un nicho ecológico ligeramente diferente. Sus presas consisten principalmente en animales bastante pequeños, como roedores, lagartos y conejos, carroña, insectos e incluso vegetación. Los pequeños carnívoros, como las comadrejas, los linces o los gatos callejeros, no están muy presentes en la dieta del coyote y aunque son del tamaño adecuado para ingerirlos, no suelen capturarlos.
Coyotes urbanos.
Debido a que son inteligentes y adaptables, los coyotes ven los hábitats humanos menos como una amenaza y más como una oportunidad. Los coyotes se han adaptado fácilmente a la vida urbana o suburbana. No les importa vivir junto a los seres humanos y las mascotas asociadas y aprovechan al máximo la comida disponible. Los coyotes urbanos comen una dieta variada y bastante repugnante, que consiste en roedores, restos de comida y ocasionalmente, algunas mascotas. Mascotas como pollos o conejos son los que mayor riesgo corren, pero los coyotes pueden atacar a cualquiera que tenga su propio tamaño y en ocasiones, que sea hasta más grande.
Coyotes y gatos.
Los gatos, especialmente los grandes y agresivos, podrían terminar en una confrontación con un coyote. Dado su tamaño relativo, es probable que un gato no gane el enfrentamiento. Los gatos tienen la capacidad de escapar ya que son mejores escaladores que los coyotes, pero no siempre tienen la oportunidad. También son lo suficientemente pequeños como para que un coyote los vea como una posible comida. Esto se aplica especialmente, si el coyote tiene mucha hambre, tal vez porque ha perdido otra fuente de alimento o que el gato sea adulto, esté enfermo o tenga sobrepeso.
Protege a tu gato.
La única manera garantizada de proteger a tu gato de los coyotes es mantenerlo siempre en el interior de la casa, tal vez con posibilidad de salir al aire libre de vez en cuando para que corra bajo la supervisión de una persona responsable. Si tu gato sale de la casa, llámalo antes del atardecer y no lo dejes salir hasta que amanezca. Los coyotes son en su mayoría, aunque no siempre, animales nocturnos. Las hembras son especialmente defensivas durante la temporada de reproducción, que va desde la mitad de la primavera hasta principios del verano, dependiendo de la región y el suministro de alimentos. Si los coyotes son frecuentes en tu localidad, sería prudente que mantengas a tus mascotas dentro de la casa durante este tiempo, permitiéndoles que salga sólo bajo supervisión de una persona adulta. Además, evita atraer a los coyotes asegurando que la basura de la casa esté en un envase a prueba de animales y no dejes fuera nada de comida para las mascotas o aves durante la noche.