Aunque algo poco común en gatos, la sarna es una condición que resulta de una infestación de ácaros. Estos pequeños parásitos desagradables causan mucha picazón y enrojecimiento de la piel de su niño peludo. Dele a su gatito un poco de alivio de estas plagas llevándolo al veterinario para un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Los ácaros de la sarna. Los ácaros son parásitos microscópicos que viven en la piel de su gato. Algunos de estos ácaros, como el Sarcoptes scabiei y el Notoedres cati, no se encuentran normalmente en la piel y son altamente contagiosos a otros gatos. Otros, como los ácaros Demodex, se encuentran generalmente en pequeñas cantidades sobre la piel y no causan ningún problema. Por desgracia, estos pequeños ácaros Demodex pueden multiplicarse rápidamente si el sistema inmunológico de un perro se ve comprometido por una condición médica subyacente. Si no se controla, todos los tipos de ácaros causan una enfermedad conocida como sarna en los gatos. Resultados de la sarna es un intenso picor, lesiones en la piel, manchas y pérdida del cabello, así como infecciones bacterianas de la piel al tratar de librarse de estas plagas.
La visita al veterinario. Si usted nota que su amiguito se rasca y su piel tiene aspecto irregular de pérdida de cabello, debe llevarlo a un veterinario de inmediato para diagnosticar su condición. Mientras que los ácaros pueden ser los culpables, muchos otros tipos de problemas de la piel, como las alergias, infecciones bacterianas o por hongos y pulgas podría ser los culpables. Para el diagnóstico, el veterinario tomará una muestra de piel y cabello para estudiarlos con el microscopio. Si los ácaros están presentes, debe prescribirle un medicamento para librar a su gatito de las plagas microscópicas. Dependiendo del tipo de ácaro, también puede comprobar en su pequeño cualquier condición médica subyacente que esté sufriendo y que podría hacerlo más susceptible a desarrollar una infestación de ácaros.
Tratamientos. Hay varios tratamientos disponibles para tratar los ácaros en su gato, incluyendo champús medicados, cremas y otros medicamentos tópicos. Dependiendo el caso particular de su gatito, su veterinario puede prescribir uno o más de estos tratamientos para librar a su pequeño del malestar. Si los ácaros han causado infecciones bacterianas o micóticas secundarias, el veterinario le recetará medicamentos adicionales para tratarlos. Él también le puede recetar un medicamento tópico para aliviar el picor de su gato durante el periodo de tratamiento.
Tras el tratamiento. Hable con su veterinario y pregúntele cualquier duda que tenga sobre cómo administrar cualquiera de los medicamentos que le haya recetado para su gatico. Algunos tópicos pueden manchar la piel y alfombras, así que use guantes cuando los aplique y mantenga a su bola de pelo en el baño mientras se seca. Asegúrese de que tenga un seguimiento por el veterinario, por lo general cada dos semanas, para comprobar el progreso del tratamiento.
Precauciones. Tenga cuidado al manejar su gatito si ha sido diagnosticado con sarna. Los ácaros de la sarna pueden infectar a las personas, causando salpullido en la piel. Aunque los ácaros por lo general no sobreviven por mucho tiempo en la piel humana, ciertamente no son algo con lo que usted quiere tener que lidiar. Use guantes para manipular a su gato y durante la aplicación de medicamentos tópicos para la piel, y siempre asegúrese de lavarse las manos después de acariciarlo. Informe a los niños en su casa a hacer lo mismo. Aísle su gatito si tiene varios en la casa para evitar que se propaguen los ácaros. Tenga a todos sus amigos de cuatro patas controlados por el veterinario como medida de precaución, ya que los ácaros pueden ser contagiosos.
Prevención. Mantenga sus gatito en los interiores para evitar el contacto con otros. Lleve a su gato al veterinario para sus exámenes anuales o semestrales para monitorear cualquier condición de salud subyacente que pueda hacerlo vulnerable a una infestación de ácaros, como la diabetes. Hable con su veterinario acerca de la vacunación de los gatos contra el virus de la leucemia felina o virus de la inmunodeficiencia felina, lo que puede comprometer el sistema inmunológico. Lave toda la ropa de cama de su gato y limpie su casa a fondo para eliminar los ácaros que quedan en su medio ambiente. Algunos tópicos preventivos mensuales contra pulgas, como la selamectina, previenen y erradican los ácaros. Hable con su veterinario acerca de qué tipos de estos medicamentos podrían ser apropiados para su pequeño.
Aunque algo poco común en gatos, la sarna es una condición que resulta de una infestación de ácaros. Estos pequeños parásitos desagradables causan mucha picazón y enrojecimiento de la piel de su niño peludo. Dele a su gatito un poco de alivio de estas plagas al llevarlo al veterinario para un diagnóstico y tratamiento adecuados.
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